En los últimos meses hemos asistido a una “guerra bancaria” en cuestión de tipos de interés tanto para depósitos como en hipotecas. Estos últimos han bajado hasta cifras impensables hace unos años con unos intereses que actualmente pueden ser inferiores al 2%.

El Instituto Nacional de Estadística (INE) apunta que todavía es una tendencia lenta pero real. De hecho, los tipos hipotecarios del año 2013 estaban alrededor del 4,37% de media, mientras que en 2012 llegaban al 4,45%.

La banca es receptiva a seguir bajando los tipos de interés porque necesitan crecer en resultados y a través de las hipotecas es una forma relativamente segura de hacerlo. La concesión de préstamos personales y a empresas son operaciones de mayor riesgo para la banca y con clientes menos vinculados. Por ello las hipotecas, bajo criterios de solvencia, son una opción de producto bien considerado por las entidades y que pueden servir para activar la mediática y recurrente “fluidez del crédito”.

El lento descenso de los tipos de interés ayuda a equipararnos con los que se ofrecen en el resto de Europa y que sumado al continuo descenso del Euribor y del precio de la vivienda hacen que sea un buen momento para comprar. Y recuerda que El Hipotecador te ayuda si tienes problemas para encontrar entidad o dudas sobre la propuesta que te haya hecho el banco.

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