Cómo negociar el precio de la casa de tus sueños

Sí, es ésta. ¡Por fin, la has encontrado! Es exactamente como la deseabas. Bueno, excepto por el precio. Y entonces es cuando decides negociar e intentar que se acerque lo máximo posible a tu cifra.

 

Aquí van unos cuantos consejos para negociar el precio de la casa de tus sueños con éxito:

 

Ten claros tu límites

Saber de cuánto dinero dispones, qué ahorros puedes usar o si tienes familiares que, en un momento dado, pueden ayudarte económicamente, es muy importante antes de empezar ninguna negociación en serio. Con una cifra en la cabeza, te será más fácil arriesgar o mantenerte firme cuando sea necesario.

 

Primero, visita al banco

Solemos ir al banco cuando tenemos ya una vivienda en mente, pero resulta mucho más útil ir antes de cualquier búsqueda. Si necesitas financiación, el banco te sabrá decir qué cantidad máxima te puede prestar y con qué condiciones. A partir de aquí, tu búsqueda de vivienda seguramente será mucho más realista. Recuerda que no es aconsejable generar un porcentaje de endeudamiento superior al 35% de los ingresos mensuales.

 

Conoce a tu vendedor

Saber el motivo de la venta del inmueble o en qué situación económica se encuentra la persona que vende la vivienda te ayudará a tener una idea sobre la urgencia para cerrar el trato y, por lo tanto, la facilidad o no para aceptar ofertas a la baja. En función de esto, puedes hacer ofertas más fuertes a la baja o tendrás que ser más cauto.

 

Negocia no solo con dinero

La venta de una casa o un piso no implica solo acordar un precio. Factores como si la vivienda necesita reformas, las plazos de pago, si hay otros bienes incluidos en el precio (muebles, parking, cuadros, etc.) van a ayudarte a bajar o subir el precio final.

 

Confía en un profesional

Los agentes inmobiliarios son una buena opción para orientarte sobre si tu oferta es demasiado baja o si todavía puedes apretar el precio un poco más. Además, suele ser más fácil tratar con un profesional que con un particular, porque el asesor es más objetivo y puede dejar de lado las emociones propias con más facilidad.

 

¡Mucha suerte a todos con vuestra negociaciones! Y, si os surgen dudas de última hora, aquí estamos para orientaros.